Fundados en la Palabra. Guiados por la Gracia. Centrados en Cristo.

Nuestra historia no es solo el relato de cómo llegamos hasta aquí, sino el testimonio del llamado de Dios a proclamar Su evangelio con fidelidad en Temuco. Nacimos de la convicción de que la verdad de Dios no debe ser reducida a un ámbito privado, sino que debe ser proclamada con claridad y amor para que transforme vidas.

En un momento crucial, el Señor puso en el corazón de un predicador y su familia el peso de establecer una iglesia donde la espiritualidad cristiana estuviera plenamente sometida a la Palabra de Dios. Poco después, otra familia con la misma convicción se unió a este propósito, reconociendo la necesidad de una comunidad donde el evangelio se predicara sin compromiso con la cultura del mundo, pero con un compromiso total con Cristo y Su verdad.

Así nació Iglesia Bautista Pacto de Gracia, una iglesia naciente que, aunque aún no está formalmente constituida, se encuentra en ese proceso con oración y diligencia. Nuestro anhelo es establecer una congregación firmemente edificada en la Escritura, con una confesión de fe clara y una estructura sólida para el servicio a Dios y la edificación de los creyentes.

Hoy, por la gracia de Dios, hemos establecido un lugar de reunión en Manuel Rodríguez 1312, donde cada domingo nos congregamos para la oración, la adoración y la enseñanza de la Palabra. Nos encontramos en un proceso de crecimiento, habiendo ya establecido una relación de consejería con una iglesia bautista reformada en Latinoamérica, que ha recorrido este camino antes que nosotros, mientras seguimos buscando vínculos con iglesias hermanas en Estados Unidos que también han transitado este mismo andar. Estas relaciones buscan afirmar nuestra comunión en la fe y fortalecer la obra con apoyo y dirección bíblica.

Aún somos pocos en número y seguimos en proceso de consolidación, pero estamos convencidos de que donde dos o tres se reúnen en el nombre del Señor, allí Él está en medio de ellos. Más que llenar un edificio, nuestro anhelo es que Temuco conozca el evangelio, que las almas que hoy viven en ignorancia sean confrontadas con la verdad de Cristo y que sus conciencias sean despertadas para salvación.

¿Quién esta a cargo de la obra?

Toda iglesia local necesita ser guiada por la enseñanza fiel de la Palabra de Dios. Aunque aún no contamos con un liderazgo formalmente constituido, la obra es dirigida por Gabriel Juri, quien ha servido en la predicación y enseñanza de las Escrituras por varios años dentro del contexto de una iglesia bautista reformada.

Su preparación teológica en el Seminario Reformado de Londres, junto con su formación en el ámbito personal y profesional, han sido herramientas que el Señor ha usado para servir a la iglesia en esta etapa de plantación. Su llamado ha sido no solo exponer fielmente la Palabra, sino también acompañar a la iglesia en su formación y crecimiento, utilizando todos los medios legítimos para la difusión del evangelio.

Junto con su esposa e hijas, sirve con diligencia en la edificación de la iglesia, confiando en que el Señor seguirá guiando este proceso hasta que podamos contar con un liderazgo plenamente establecido conforme al modelo bíblico.

Ser parte de Iglesia Bautista Pacto de Gracia no es solo asistir a un culto, sino integrarse a una comunidad que vive el evangelio en amor y verdad. Nuestra iglesia no busca solo transmitir información doctrinal, sino que enfatiza su aplicación práctica. Creemos que la verdadera comprensión de la doctrina se manifiesta en acciones concretas de amor a Dios y al prójimo.

Este amor se expresa en:

• Un juicio caritativo hacia los hermanos, asumiendo lo mejor de los demás en todo momento.
• Una humildad genuina en la confrontación, reconociendo que nuestros propios pecados y limitaciones afectan nuestra percepción de la verdad.
• Una dependencia total de Dios y de los procesos que Él ha establecido para la edificación de Su Iglesia.

Creemos que la integración a la comunidad ocurre de manera orgánica, a través de la participación en las actividades de la iglesia y del compañerismo que surge naturalmente entre los hermanos.

Nuestros servicios dominicales reflejan nuestra convicción de que la adoración a Dios debe ser ordenada, reverente y centrada en Su Palabra:

1. Oración congregacional – Un espacio íntimo donde intercedemos por las necesidades de la iglesia.
2. Servicio de adoración – La reunión principal, donde la predicación expositiva de la Escritura es el centro.
3. Servicio de formación – Un tiempo dedicado a la enseñanza doctrinal profunda para el crecimiento de la iglesia.
4. Servicio de evangelización – Un servicio especialmente enfocado en presentar el evangelio con claridad a los no creyentes.

Cada uno de estos momentos tiene el propósito de edificar a los creyentes y proclamar la verdad de Cristo con fidelidad.

El mandato de hacer discípulos no es opcional para la Iglesia. Creemos que el evangelismo debe darse en tres ámbitos fundamentales:

1. Eclesial – A través de la predicación evangelística y las conversaciones dentro de la iglesia.
2. Familiar – Criando a nuestros hijos en las verdades del evangelio, formándolos con sabiduría para salvación.
3. Externo – Mediante el testimonio personal de cada creyente en su entorno: familia, amigos, compañeros de trabajo y vecinos.

No queremos que el evangelio sea un tema marginal en nuestra ciudad, sino que sea conocido, discutido y que transforme corazones para la gloria de Dios. Por esta razón, nos esforzamos en utilizar todos los medios legítimos disponibles para la proclamación del evangelio, tanto en el ámbito físico como en el digital. No estamos atados a un tradicionalismo ciego ni a purismos sin sentido, pero tampoco queremos ser piedra de tropiezo. Nuestra meta es que el mensaje de Cristo sea predicado con fidelidad y que muchos sean llamados al arrepentimiento y la fe.

Este es el llamado que Dios nos ha dado, y con Su gracia, seguimos adelante confiando en que Él edificará Su Iglesia.